Normalmente en Rumanía los inviernos son fríos, con mucha nieve y fuertes vientos. Otras veces es más tranquilo el tiempo. Este invierno hubo varios destrozos. Empezó a nevar a finales del otoño. El mal tiempo fue desde diciembre. El peor tiempo estuvo en el sureste, donde las escuelas estuvieron cerradas durante unos días; algunas personas quedaron enterradas en sus casas porque la nevada cubrió las casas. Fue necesaria la ayuda militar para llevar la comida y el agua a las casas. El ayuntamiento mandó máquinas para quitar la nieve de las carreteras y que puedan circular los coches.
Poco a poco, la nevada se paraba y en el norte se paró. Hace unas semanas, paró de nevar y ahora se descongela la nieve y el hielo. Los campos y carreteras se están llenando de agua, pero ese agua se va a los ríos.
Víctor
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