Hexágonos y Antigravedad.
(Basado en hechos reales)
Erase
una vez, un investigador de insectos llamado Viktor Grebennikow. Tuvo un hijo
llamado Dimitri Grebennikob muy travieso. Victor experimentaba cada día en el
garaje de su casa y un domingo descubrió algo asombroso. ¡Los paneles de abeja
hexagonales tenían un efecto antigravitatorio ¡Construyó unos paneles con
metal, madera y papel y también funcionaron. Después de años de investigación, Viktor
creó una plataforma dirigible con un manillar encima. Su hijo Dimitri estaba
preocupado por él y siempre le vigilaba en su garaje, porque su madre hablando
sola decía:”Algún día me quedaré viuda por culpa de este viejo loco”. Dimiti no
sabía lo que era, pero se preocupaba. Un día su padre se fue al bosque y su
hijo fue al garaje. Inspeccionó el lugar y encontró la plataforma voladora y la
probó. Pobre Dimitri, ¡salió volando y nunca se supo más de él¡
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