Mi tía Marisa es muy trabajadora.
Aunque sé que el
domingo no fue el día de la mujer trabajadora pero fue más interesante el
domingo que el jueves para mí.
El domingo me
levanté con muchos nervios, comimos y nos fuimos al hospital de Huércal-Overa
para verla, la tenía mi madre, una niña preciosa se llama Laura Aparicio
Rojas, fruto de mi tito Francisco y tita Marisa, que es la mejor tita del mundo,
trabaja de enfermera en ese mismo hospital.
Mi tita llego más
tarde que mi prima Laura.
Por eso,yo pude
cogerla y hacerle muchas fotos; pero, cuando llegó la aplaudimos y le digimos
!enhorabuena Marisa!, y, gracias por hacer que mi abuelo deje de llamarme el
“pequeñico de la familia”.
Muchas gracias
tita Marisa por Laura y por todo lo que has hecho por mí.
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